Maternidad Baule. Escultura madera, Costa de Marfil 1990 (3)
Maternidad Baule.
Dimensiones: 480 x 100 x 100 mm, 1.300 g.
Los baules (baoules, bawules), al igual que otras etnias de África, representan con frecuencia la maternidad en el arte en forma de mujeres con grades pechos amamantando, sea en madera tallada, sea en bronce a la cera perdida, marfil, piedra o terracota.
Los baules son una etnia melanoafricana del conjunto étnico-lingüístico akan; son agricultores de religión animista que viven en Costa de Marfil (2 millones y medio, 8% de la población).
El tema de la maternidad es universal y recurrente en el arte de toda el África negra. Las estatuas de maternidad africanas no suelen expresar los lazos afectivos entre madre e hijo, ya que simbolizan la fertilidad de las mujeres y de la tierra, pertenecen al dominio de lo sagrado y con frecuencia se exponen en un altar. Las madres están en posición hierática, muy bien esculpidas, mientras que el niño, con frecuencia un adulto reducido, está apenas esbozado, sobre todo el cuerpo, y no hay casi nunca miradas entre madre e hijo.
En muchas etnias africanas, el lado izquierdo del cuerpo tiene relación con lo sagrado: en la mayoría de maternidades de África negra, el niño está colocado hacia la izquierda de la madre o mamando del pecho izquierdo.
En esta obra, el niño se sujeta de los pechos de su madre, signos de vida.
Los baules (baoules, bawules), al igual que otras etnias de África, representan con frecuencia la maternidad en el arte en forma de mujeres con grades pechos amamantando, sea en madera tallada, sea en bronce a la cera perdida, marfil, piedra o terracota.
Los baules son una etnia melanoafricana del conjunto étnico-lingüístico akan; son agricultores de religión animista que viven en Costa de Marfil (2 millones y medio, 8% de la población).
El tema de la maternidad es universal y recurrente en el arte de toda el África negra. Las estatuas de maternidad africanas no suelen expresar los lazos afectivos entre madre e hijo, ya que simbolizan la fertilidad de las mujeres y de la tierra, pertenecen al dominio de lo sagrado y con frecuencia se exponen en un altar. Las madres están en posición hierática, muy bien esculpidas, mientras que el niño, con frecuencia un adulto reducido, está apenas esbozado, sobre todo el cuerpo, y no hay casi nunca miradas entre madre e hijo.
En muchas etnias africanas, el lado izquierdo del cuerpo tiene relación con lo sagrado: en la mayoría de maternidades de África negra, el niño está colocado hacia la izquierda de la madre o mamando del pecho izquierdo.
En esta obra, el niño se sujeta de los pechos de su madre, signos de vida.