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DE Virgen de la Leche, Lucas Cranach el Joven. Museo nacional BA. Fotografía, Cuba 2024
Fotografía tomada por José María Paricio Talayero durante su visita a La Habana con motivo de un Simposio de Lactancia dentro del XXIX Congreso Cubano de Pediatría y una invitación para dar una charla para La Liga de la Leche de Cuba.
Dimensiones: 2276 x 1250 píxeles
La Virgen y el Niño, óleo sobre madera de 57 x 32 cm, del siglo XVI. Atribuido al pintor renacentista alemán Lucas Cranach el Joven (Wittenberg, 1515 – Weimar, 1586).
Se conserva en el Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba, edificio Arte Universal, en La Habana.
Esta obra es muy similar a otro óleo sobre madera de 57 x 34 cm de alrededor de 1530 atribuido al padre y maestro del pintor, Lucas Cranach el Viejo (Kronach, 1472 – Weimar, 1553), que se conserva en el Monasterio de los Capuchinos de Innsbruck (Austria) y que fue ampliamente copiado por muchos otros pintores, ente ellos su hijo. Los estilos de ambos, padre e hijo, son tan parecidos que ha habido problemas de atribución de obras.
La modelo de esta obra, como la de tantas otras de Cranach padre e hijo y algún otro pintor de la época, es Catalina de Mecklemburgo-Schwerin (1487-1561), duquesa de Sajonia. Tanto ella, como Lucas Cranach el Viejo, fueron firmes y tempranos partidarios de la reforma luterana.
La Virgen y el Niño, óleo sobre madera de 57 x 32 cm, del siglo XVI. Atribuido al pintor renacentista alemán Lucas Cranach el Joven (Wittenberg, 1515 – Weimar, 1586).
Se conserva en el Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba, edificio Arte Universal, en La Habana.
Esta obra es muy similar a otro óleo sobre madera de 57 x 34 cm de alrededor de 1530 atribuido al padre y maestro del pintor, Lucas Cranach el Viejo (Kronach, 1472 – Weimar, 1553), que se conserva en el Monasterio de los Capuchinos de Innsbruck (Austria) y que fue ampliamente copiado por muchos otros pintores, ente ellos su hijo. Los estilos de ambos, padre e hijo, son tan parecidos que ha habido problemas de atribución de obras.
La modelo de esta obra, como la de tantas otras de Cranach padre e hijo y algún otro pintor de la época, es Catalina de Mecklemburgo-Schwerin (1487-1561), duquesa de Sajonia. Tanto ella, como Lucas Cranach el Viejo, fueron firmes y tempranos partidarios de la reforma luterana.